Para la adecuada práctica deportiva,
especialmente el atletismo es de gran trascendencia la buena elección
de calzado deportivo, ya que el uso de zapatillas inapropiadas, con
el tiempo, puede acarrear graves consecuencias para el organismo.
Decidir el tipo de zapatilla idónea es
muy fácil en la actualidad, afortunadamente, las casas comerciales
emplean grandes esfuerzos en realizar estudios anatómicos y
biomecanicos para obtener productos de la máxima calidad posible
para cada una de las disciplinas, centrándose también en el
superficie o terreno sobre el que realizamos el deporte.
Antes de nada es de gran importancia
conocer nuestra morfología del pie, no todas las personas pisan
igual, ni tienen el mismo tipo de pie, hay pies cavos, normales y
planos en diferentes ángulos..pero a grandes rasgos se pueden
dividir a los atletas según el tipo de pisada: pronador, supinador o
neutro.
Pronador: Se da cuando tendemos a
caminar haciendo un giro natural del pie hacia dentro, a veces
resulta negativo dado que supone un exceso de empuje hacia el
interior. Normalmente se llaman pronadoras a las personas que suelen
juntar las rodillas o tienen pies planos. En el peor de los casos,
ser pronador podrá suponerte torceduras en el pie y en la rodilla
(la mayoria de mujeres son pronadoras).
Supinador: Ocurre todo lo contrario,
los supinadores acostumbran a apoyar de forma especial toda la parte
externa delantera del pie. La supinación excesiva puede generar
problemas en la rodilla y en el tobillo.
Neutro: Es el apoyo del pie universal,
los tobillos no tienden a girar ni hacia el interior ni hacia el
exterior cuando se corre. El apoyo comienza por la parte externa del
talón ejerciendo una discreta pronación por parte del mediopié y
despegando entre el 1º y 2º metatarsiano. El apoyo medio del pie ha
de corresponder al 1/3 total del ancho de la huella plantar.
(aproximadamente un 40% de los corredores tienen pie neutro.)
Análisis de nuestra pisada.
Existen varias técnicas para comprobar
el tipo de pisada que tenemos como fijarse por donde se desgastan los
zapatos o deportivas, viendo la huella que tenemos en los pies si lo
tenemos plano, neutro o cavo,..pero actualmente existen profesionales
de la medicina que estudian la dinamica de la carrera del corredor y
elaboran informes conteniendo observaciones para la corrección de
las alteraciones encontradas. En centros especializados en venta de
calzado deportivo, aquí en Mallorca la tienda 'Correcaminos',
analizan nuestra forma de correr en una cinta mecánica, y te
asesoran en la elección de la zapatilla adecuada. Muchas veces los
vendedores son atletas, siendo esto de gran ayuda a la hora de
aconsejar.
Más características de las zapatillas
Además de las zapatillas de control de
movimiento (pronador, supinador, neutro) existen otras
características que nos ayudan a elegir el modelo de la zapatilla,
que hace que sean mejores a otras deportivas en cumplir alguna
función:
Zapatillas con buena amortiguación:
Para corredores que necesitan gran capacidad de absorber el impacto,
o bien, quienes realizan la actividad en superficies duras.
Zapatillas para terreno variado (trail
running): Hechas para correr por tierra, piedras, todo tipo de
terrenos. Se caracterizan por tener buena tracción sobre cualquier
superficie y gran durabilidad.
Zapatillas para performance: Son un
calzado liviano para entrenamientos muy veloces o competencias que
necesiten una libre movilidad en los pies.
Cuando cambiarlas?
En general, las tiendas de deportes
especializadas recomiendan cambiar de zapatillas cada 700 o 800
kilómetros, dependiendo de tu estilo de carrera, de tu peso, y de la
superficie en la que corremos. Los corredores mas ligeros pueden
cambiarlas cerca de los 800 kilómetros, mientras que los corredores
mas pesados deben considerar cambiarlas cerca de los 650 o 700 km.
No te fíes si el aspecto de las
deportivas es bueno. Deberemos comprobar la suela, su desgaste o
rotura que nos dará un indicio de cambio, pero lo importante es la
media suela, que el la que proveé el amortiguamiento y la
estabilidad, normalmente se reompe antes que la suela muestre signos
importantes de desgaste.
No es fácil verificar el interior de
la capa de la suela, por eso es importante llevar un control de
kilometraje, fijar en un calendario el dia que las compramos y los
kilómetros que recorremos con ellas. Si notamos fatiga en los
músculos, dolor en las espinillas o en articulaciones, puedes estar
usando zapatillas que ya no tienen amortiguación adecuada.
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